lunes, 10 de noviembre de 2008

Los dueños de medios de comunicación impresos, que abusivamente se irrogan la representación de la opinión pública y se presentan como paladines de la Libertad de Prensa no son sino entusiastas gonfaloneros de un sistema egoísta en el cual la información, como otras cosas, es una simple mercancía.
Los diarios de circulación masiva, con escasas excepciones, resultan ser así cajas de resonancia de variados intereses, sobre todo económicos, que nada tienen que ver con las aspiraciones del pueblo peruano.
En esos diarios, los periodistas han pasado a un tercer y deslucido plano: son simples peones a sueldo de un patrón todopoderoso, que se incomoda cuando osan tocar sus intereses o sus feudos. El derecho de opinión del periodista, que era en los años 60 y 70 una bandera periodística de lucha, ha sido conculcado y en esos medios ya ni siquiera se permite una columna firmada por sus periodistas de planta pues ello es exclusividad de sus colaboradores más afines.
El periodista se ha convertido así en una especie de reportero que sólo transcribe una realidad, sin capacidad de interpretarla y aclararla, o ponerla en el contexto, como mandan los cánones modernos de la prensa interpretativa.
Y eso es lo que le gusta al Presidente García, que a falta de una oposición política con todas las de la ley apenas si tiene algunos periódicos contestatarios que se nutren de los escandaletes de uno u otro funcionario que mete la mano por allí, pero que en el fondo no ponen al debate los grandes y postergados problemas de la Nación Peruana.
Eso es lo que no quieren cambiar desde las altas e inaccesibles esferas del Gobierno. Quieren que todo siga marchando al compás de la Constitución de Fujimori; Alan García se asusta incluso de la Constitución de 1978 que dictó Víctor Raúl Haya de la Torre.
La verdad, para ser justos, es que no es este un Gobierno del Apra, sino sencillamente un gobierno del Dr. García y sus aliados. Ellos son los que nos están llevando sobre esta ola de bonanza, de la cual se vanaglorian, pero que ojalá sepan administrar hasta el final.

2 comentarios:

Wagner M Benavides dijo...

Se deben crear políticas inteligentes que acaben con la prensa de la franela, esa prensa que cubre los fenasos y a sus mas conspicuas ratas

AsesoríasGina dijo...

Muy interesante su blogger. Espero que este y otros temas de actualidad sean tomados en cuenta y que se manifiesten ante tanta injusticia como lo han hecho via radial en cuanto a la guerra en tierras del medio oriente.
No se puede soportar tanto sufrimiento de los inocentes. Los niños no tienen la culpa de las guerras son almas inocentes que estan muriendo como si nada.
Es preciso la intervencion de la ONU, este problema esta muy dificil de resolver de otra manera.